Dos amigas, dos historias, dos destinos...
Una era la luna, brillante y natural
La otra era una estrella, luminosa y fugaz.
Siempre a la distancia algo las unía
Y era su eterna y verdadera amistad.
Y era su eterna y verdadera amistad.
La luna y la estrella, amigas y compañeras,
La luna y la estrella, sueños y deseos en común poseían,
La luna y la estrella pensaron que jamás se separarían.
Pero algo estaba escrito
Dos caminos distintos transitarían.
Dos caminos distintos transitarían.
Sin embargo, nunca se separarían porque la noche por siempre las uniría.
Dos amigas, dos historias, dos destinos...
Dedicado a mi mejor amiga Jenny, que se fue a Suiza. Por situaciones de la vida, nos tuvimos que separar.
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